La carne es uno de los productos que más se consume en cualquier hogar. Al ser altamente proteínica, se recomienda consumirla fresca, sin embargo, cuando se hacen compras grandes, debe congelarse para poder consumirse en las siguientes semanas. Contrariamente a la creencia popular, la carne congelada no pierde su valor proteínico ni nutricional, eso sí, resulta fundamental que el proceso de conservación y congelado se haga de forma correcta.
Guía de conservación de la carne en casa
Por tratarse de un alimento con gran contenido de agua y proteínas, la carne es susceptible de ser contaminada por bacterias como la salmonella o el e-coli. Por eso, a continuación te ofrecemos una pequeña guía que te ayudará a seleccionar, congelar y descongelar en casa la carne para su consumo, eliminando cualquier riesgo de contaminación.
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Asegúrate de comprar carne fresca y de buena calidad. Revisar la etiqueta de envasado, el color y la apariencia de la carne es fundamental para saber que la podemos comer sin problema.
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Antes de congelarla, la carne puede estar en la nevera durante 2 o 3 días como máximo. Si está envasada en bandeja, puede ir directo a la nevera. De lo contrario, deberás envasarla en un recipiente hermético y limpio, evitando la entrada de aire que puede ayudar a la proliferación de bacterias. Después de este tiempo, si no se ha consumido será necesario que la congeles.
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Corta la carne en filetes o trozos grandes antes de congelarla y envuélvelos en papel film o aluminio. En caso de que la carne tenga mucha grasa, es mejor que cortes la grasa visible antes de congelarla.
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Revisa el congelador y su temperatura ya que la congelación debe hacerse lo más rápidamente posible. Una vez congelada la carne se puede conservar durante meses.
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En el caso de que la carne esté cocinada, se puede congelar y envasar en un recipiente limpio y hermético. Eso sí, es importante que esté fría antes de meterla en el congelador.
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La descongelación debe hacerse muy lentamente y de forma natural. Una vez descongelada, proceso que puede tardar entre 6 y 8 horas, se debe cocinar enseguida, ya que la carne inicia rápidamente su descomposición.
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Recuerda que ningún producto fresco o cocinado puede ser congelado dos veces. Una vez descongelado debe consumirse el mismo día.
Ahora que ya sabes cómo congelar perfectamente la carne, tan solo te queda comprarla de la mejor calidad. ¿Has probado la carne de Faccsa-Prolongo?
